domingo, 8 de enero de 2012

El color del mar

Estaba sentada en el viejo cesped de una colina con vistas al mar. Se abrazaba las rodillas como cada vez que tiene miedo, el viento le apartaba el pelo de la cara. Miraba hacia el mar con la sonrisa de la Gioconda, y estando allí sentada apareció el y se sentó justo a su lado, sin decir una palabra la miró y volvió su cara hacia el mar. No dijo nada pero ella sabía lo que le estaba diciendo, todo y nada. Los dos se quedaron en aquella colina frente a la profundidad del mar.
Sonó el despertador, mar en su almohada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario